Colombia (con grandes jugadores como Carlos Valderrama, Freddy Rincón, Faustino Asprilla y Leonel Álvarez), no solo ganó las eliminatorias invicta, sino que envío a Argentina a jugar la repesca intercontinental contra Australia, el representante de Oceanía. Previamente, solo se habían disputado torneos internacionales entre las selecciones de Argentina y Uruguay, en la Copa Newton, la Copa Lipton o la Copa Honor Argentino. En los años siguientes, Argentina disputaba partidos solamente contra equipos sudamericanos ya que las demás selecciones alegaban que los viajes eran largos y el desarrollo de la primera guerra mundial.